-Es muy parecida a la tortilla española, pero queda más jugosa por el pan mojado en leche.
-Pásala más o menos según os guste, pero no la hagas mucho para que quede cuajada por dentro pero no reseca.
Ingredientes para cuatro personas
6 huevos.
1 cebolla mediana.
4 rebanadas de pan del día anterior.
½ vaso de leche.
Aceite.
1 cucharada de perejil picado.
Sal.
Modo de cocinar
Pon la leche en un plato y mete las rebanadas de pan a remojar, dales la vuelta pasado un rato para que se empapen por los dos lados.
Pela, lava las patatas y córtalas en rodajas finas, sazona con sal.
Pela las cebollas y pícalas finamente, échales un poco de sal.
Calienta abundante aceite en una sartén grande y cuando este bien calienta añade las patatas y la cebolla picada, deja que se frían a fuego medio, muévelas de vez en cuando para que se hagan bien y no se peguen. Saca las patatas y la cebolla con una espumadera, escurriendo bien el aceite, a un recipiente grande y reserva.
Escurre las rebanadas de pan y desmenúzalas.
Casca los huevos en un cuenco y bate muy bien, incorpora el pan, una pizca de sal y el perejil picado, mezcla bien y échalo sobre las patatas, remueve y deja unos minutos.
Calienta 2 cucharadas del aceite de freír las patatas en una sartén mediana y profunda, cuando el aceite este bien caliente añade la mezcla anterior, baja el fuego y deja que cuaje la parte inferior, mueve la sartén de vez en cuando para que no se pegue o queme la tortilla. Retira del fuego y coloca un plato llano encima de la sartén a modo de tapadera, vuelca la sartén en el plato con cuidado para que no se desparrame la tortilla, vuelve a poner la sartén en el fuego, añade otras 2 cucharadas de aceite y desliza la tortilla del plato suavemente en la sartén hasta que quede colocada nuevamente. Deja que se haga durante unos minutos. Retira del fuego y vuélcala sobre una fuente de servir, adorna con un poco perejil.
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